Ojalá que llueva café: Donde lo increíble se hace real

Colombia está llena de sorpresas entre ellas está el Parque Natural Nacional Islas Corales del Rosario. Bañadas por el Caribe, este archipiélago de 27 islas de origen coralino esconde lugares increíbles. Hay muchas empresas que ofrecen visitas de un día pero yo, aconsejada por unos amigos, decidí pasar la noche en el Resort Gente de Mar situado en Isla Grande, y no me equivoqué. No es un resort de lujo, como los 5 estrellas que hay en otras zonas del Caribe, pero es un lujo de resort para disfrutar de la naturaleza.

Salgo del muelle de La Bodeguita en lancha rápida un poco decepcionada con el tiempo, que no acompaña. Antes de llegar al destino, mientras unos van al acuario, me decido a hacer snorkel con el copiloto Chocolate que me enseña los diferentes peces y corales de la zona. Cuando me llevan a Gente de Mar hay mucha gente que sólo ha ido a pasar el día, y cuando se van la playa es para mí. Sólo hay una pareja alojada en el hotel, después de cenar langosta y patacones los trabajadores se van a sus casas y se queda Fran, un hombre encantador y amable. El resort y la playa entero para cuatro personas.

Fran nos propone ir a la Laguna Encantada a nadar en la noche, pues no hay luna y es la mejor condición para descubrir su secreto. Pido un deseo, como me aconsejo un pescador en la playa, y me echo al agua. No tengo fotos porque eso hay que vivirlo, es espectacular! Se te ilumina en cuerpo en el agua oscura cuando te mueves, y burbujitas de luz te rodean. Es un lugar mágico!

Realmente no es una laguna, sino que es una zona de manglares abierta al mar, donde hay mucha concentración de plancton bioluminiscente que se activa con el movimiento. La sensación es maravillosa, como si estuvieras viviendo la película de La Sirenita con la magia de Disney.

Volvemos al hotel fascinados y agotados, para dormir unas 10 horas por lo menos. Recomendaciones: llevar linterna, gafas de bucear y repelente de insectos.

Por la mañana con la playa para nosotros Fran nos ofrece ir a bucear en kayak a otra isla, y otra vez nado entre corales y peces de colores disfrutando como nunca de lo que veo. Lamentablemente muchos corales están muertos por la pesca con dinamita, ahora prohibida, pero no deja de ser un espectáculo. A la vuelta damos un paseo en kayak para conocer Isla del Pirata, con un hotel de cabañas con buena pinta aunque no tiene playa. A las 15:30 toca volver a Cartagena, un último baño en el mar y un agua de coco para hidratarse antes de partir. La bomba de agua del hotel se estropeo así que me aclaré el salitre con un cubo a la antigua usanza.

Un viaje increíble y mágico, os dejo las fotos a continuación